Hace apenas 20 días escuchamos a Claudia Sheinbaum jurar que cumpliría y haría cumplir las leyes de nuestra nación y ya faltó a su juramento. En México las leyes sí están para aplicarse y no importa qué diga quién, las decisiones de un tribunal no pueden desconocerse sino que se acatan mientras uno se inconforma y un tribunal colegiado decide quién está en lo correcto. Así de simple. La manipulación mediática de la opinión popular solamente nos llevarán al autoritarismo y va en contra de la República que decimos querer. Quienes digan lo contrario no conocen de leyes o no quieren una república. En ninguna parte de la Constitución dice que es facultad del presidente de la república determinar la legalidad de lo que deciden los jueces. En el caso especifico de la presirvienta, lo que está sucediendo no es que la jueza esté por encima de la constitución, lo que sucede es que, ella opina que la reforma al poder judicial viola los principios de la constitución y los tratados internacionales, por consecuencia, una reforma así no puede entrar en vigor y todos los demás deben acatar la decisión de la juez, porque para eso está ahí y por eso se le puso, aunque se pueda impugnar para dejar que un tribunal colegiado, que es un órgano compuesto por mas de un juez, analice los argumentos de ambas partes y tome la decisión final. El caso que estamos viviendo en México es de especial importancia porque esta enviando un mensaje espantoso a los ciudadanos. El mensaje es que si no nos gusta lo que digan las leyes podemos hacer lo que queramos. Y no es así. Las leyes deben cumplirse porque no hay otra forma de regular la conducta de las personas ni de organizar a la sociedad para convivir en paz. Si la primera dama del país, tengo duda en eso de dama, ya dijo que desconoce la constitución y desobedece sus leyes, ¿qué podemos esperar de los demás miembros del gabinete? ¿Y de los trabajadores de las dependencias federales? ¿Y de los ciudadanos? No ha transcurrido un sólo mes desde que ésta mujer tomó posesión en el cargo que tiene la mayor responsabilidad del país y ya es una mentirosa delincuente. Además, nos estamos quejando de que no hay empleos formales en el país, los números del mismo gobierno indican que los empleos formales cada vez son menos, y la señora decide confundir mas las cosas lográndoselas asustar a los inversionistas mexicanos y extranjeros que cada vez observan que las inversiones en el país no están seguras porque no hay ley que valga, sino los caprichos de una mujer o un grupo de personas que a toda costa quieren quedar bien con los pobladores del país pero no con aquellos que generan el capital para sobrevivir. Ahora, es muy claro que el Poder Judicial de la Federación está bajo ataque del poder ejecutivo pero ¿cuál es la razón de todo ello? ¿Por qué tanto encono en destruirlo y debilitarlo? En realidad el problema no es el poder judicial per sé, sino que es autónomo y no responde afrimativamente a los caprichos de la figura presidencial que no tolera que nadie le diga que no. Lo hemos visto con la negativa de acatar las resoluciones judiciales que no le favorecen. Aquí el problema es que despues de ellos seguimos nosotros. Si se han dado cuenta, han culpado desde hace seis años a todos menos a ellos de lo que sucede en el país. Quieren corregir todo menos lo que a ellos corresponde. Por eso no se han mencionado los ministerios públicos ni las fiscalías que es donde ocurre mas del 95% de los actos de corrupción que molestan a la gente. ¿Quién quedará para defendernos de los abusos de un gobierno totalitario despues? Nadie. Por eso necesitamos apoyar a los miembros del Poder Judicial siempre pero, también es cierto que necesitamos que los miembros del Poder Judicial nos apoyen a nosotros siempre. Es una relación bilateral que no funcionará a menos que estemos unidos.