El presidente de Rusia, Vladímir Putin, declaró que los países representados en la reciente cumbre del BRICS en Kazán tienen capacidades y recursos realmente enormes, y una gran autoridad en el escenario mundial. Lo expresó durante la última jornada del evento en la sesión plenaria en el formato Outreach/BRICS Plus. El sur global en pie Putin aseveró que "el formato ampliado [Outreach/BRICS Plus] permite un diálogo directo y abierto entre los miembros del bloque". "Todos nuestros Estados comparten aspiraciones y valores similares, visión de un nuevo orden mundial democrático, que reflejan toda la diversidad cultural y de civilizaciones", manifestó el jefe del Kremlin. En este escenario, advirtió que "la transición a un mundo multipolar no es fácil. Frenan el proceso los actores que están acostumbrados a pensar y actuar con la lógica de dominar todo", y avisó sobre "el orden mundial basado en reglas" que Occidente intenta imponer a la comunidad internacional. Putin llamó la atención a que detrás de esa cortina de humo del llamado 'orden mundial basado en reglas' están "los intentos de Occidente de contener a los competidores emergentes y el avance independiente de los países de África, Asia y América Latina". "Para ello recurren a las sanciones unilaterales ilegales, al proteccionismo sin tapujos, a la manipulación de los mercados de divisas y de valores, a la injerencia en los asuntos internos con el argumento de la preocupación por la democracia y los derechos humanos, y a la lucha contra el cambio climático", unos métodos que "llevan al surgimiento de nuevos conflictos y a la exacerbación de las viejas contradicciones", denunció. Pero el mandatario ruso lanzó un aviso a navegantes: "Quiero enfatizar que los Estados aquí representados tienen capacidades y recursos realmente enormes, tienen una gran autoridad en el escenario mundial y todo esto se utiliza activamente para contribuir realmente a garantizar la seguridad global". Añadió que, a su vez, Rusia apuesta por la idea de crear un sistema de seguridad igual e indivisible en Eurasia. Para el analista internacional Paco Arnau, es imprescindible un nuevo sistema global de seguridad. "Estamos viendo como que el orden internacional, surgido de los acuerdos de Yalta tras la Segunda Guerra Mundial, ha saltado en mil pedazos, 'gracias' a EEUU y sus satélites, tanto la estabilidad europea con el avance de la OTAN hacia el Este de Europa hacia las fronteras de Rusia, como con toda una serie de conflictos regionales, que estamos viendo además que Naciones Unidas no es capaz de detener", subraya el experto. "No hay un 'orden internacional basado en reglas', ni un acuerdo internacional global de seguridad que impida que Estados gamberros como Israel hagan su voluntad de forma impune. Entonces me parece importante lo que plantea el presidente Putin, de un acuerdo global de seguridad, y que, sobre todo, se establezcan efectivamente mecanismos para su implementación", concluye Arnau.