Una competición que se considera la fórmula uno de la vela, debido a las velocidades que se llegan a alcanzar. Y además porque se utiliza todo tipo de tecnología, que ayudan a solventar los problemas en alta mar. La mayoría de los barcos que compite están fabricados en España en concreto en Castellón de Plana. Y un español Marcelino Botín, es uno de los mejores diseñadores de barcos de competición del mundo .