En Venezuela, ante la escasez de ciertos productos, el Gobierno ha colocado como prioridad en su agenda de trabajo la lucha contra el contrabando de artículos de consumo básico, subsidiados, que alcanza el 40% de las importaciones y compras que Venezuela hace para abastecer su mercado.Para evitarlo, el presidente Nicolás Maduro ha anunciado la instalación en los comercios públicos y privados de un sistema biométrico o de captahuellas, que evitará las reiteradas compras de productos por parte de un mismo usuario, que podrían ser destinados al contrabando o a la economía informal.Empresarios opositores y consumidores rechazan la medida, que califican como una cartilla de racionamiento y vaticinan que no resolverá el problema del desabastecimiento, sino que generará un mercado negro dentro del país.El juez estadounidense Thomas Griesa, a cargo del litigio presentado contra Argentina por varios fondos de inversión (los llamados fondos buitre) considera "inválida e ilegal" la última propuesta anunciada desde el Gobierno de Buenos Aires, que planea trasladar el pago de los bonos de deuda reestructurada a Buenos Aires para para evitar el bloqueo que se mantiene en Nueva York a partir de una demanda presentada por fondos especulativos.El Gobierno argentino apela a la unidad nacional en apoyo a la medida; sin embargo, desde la oposición se han mostrado contrarios y anuncian que no la respaldarán. Los sindicatos han convocado una jornada de huelga el próximo jueves en protesta por la política económica del gobierno.En Perú, los médicos han cumplido 100 días en huelga. Reclaman participar en la reforma de salud, ya que la actual la califican de privatización del sector; la contratación anual de más de un 20% de médicos, la restitución de seis artículos derogados en la Ley del Trabajo Médico; y el cumplimiento de la escala remunerativa que hace referencia al aumento de 1.500 soles según acuerdos alcanzados en 2012 y 2013. El gobierno, para intentar acabar con la huelga, les ha ofrecido bonos de 200 soles mensuales durante dos años, pero los médicos lo han rechazado.