Description
, derribando a los soldados hunos con sus poderosas garras y mordiscos feroces. El emperador Valentiniano lideraba a su ejército con coraje y estrategia, aprovechando la distracción que los espinosaurios generaban para contraatacar con vigor. El ejército de Atila se sorprendió ante la resistencia y la fuerza de los romanos. Los espinosaurios resultaron ser una fuerza imparable, sembrando el caos en las filas enemigas. Atila, lleno de furia y frustración, intentó enfrentarse a los espinosaurios personalmente, pero fue rápidamente superado por su tamaño y ferocidad. Finalmente, Atila y su ejército fueron derrotados. Los romanos celebraron su victoria con júbilo y gratitud hacia los valientes espinosaurios.JOSÉ PARDAL