¡Ay, Las Roturas de Cuba! Un programa que nace de la premisa frecuentemente esgrimida en estas directas de, "en la Cuba de los últimos 60 años, qué nos queda sino reírnos de lo que nos hizo llorar". Este Atico de Pepe, con su conductor Pepe Forte, titulado, "¡Ay!, Las Roturas de Cuba" inicia con una necesaria explicación para los seguidores del show que nos son cubanos, porque la rotura de un enser doméstico, o de cualquiera de los componentes de una casa, no son motivo de preocupación para ningún ciudadano del planeta, porque lo que se descompone, se rompe o se daña, o bien se repara, o se sustituye por uno nuevo... ¡pero en la Cuba comunista de después de 1959, ambas cosas eran imposibles! Aunque el fenómeno prevalece, en este Atico de Pepe nos concentramos en las roturas de Cuba que van por las décadas de los 60, 70 y 80, que podrían ser consideradas como los clásicos del caso. El programa hace, de una manera divertida, burlona, un repaso por las roturas de Cuba, y estratifica, califica, en un escala de mayor a menor las peores, las más acuciantes, las mas preocupantes, las mas inquietantes para los moradores, en tanto lo que representa lo que se rompió como necesidad perentoria del hogar, y lo difícil que era (en realidad imposible en la mayoría de los casos, reparar o reemplazar el sujeto de la rotura), y en ese conteo enervante, destacan la rotura del retrete o la taza del inodoro; el refrigerador, y la bomba o el motor del agua  que sube el líquido de la cisterna o depósito a los tanques de la gravedad en la azotea del inmueble. Ya que tantos lloramos con esta roturas, vamos a reírnos de ellas en este episodio de El Atico de Pepe. #roturasencuba #ElAticoDePepe #pepeforte