Description
Sufrir una prueba no depende en absoluto del alma, y nada se podrá hacer directamente para entrar en ella. Depende exclusivamente de la voluntad de Dios. Lo que te aconsejo
es que estés tranquila y que no te preocupes por lo que sucederá. Todo concluirá en gloria de Dios y en santificación del alma.
Además, mantente siempre humilde ante la voluntad infinita del Señor, ensancha siempre tu corazón, agradece sin interrupción al buen Dios los favores que continuamente te otorga, porque no es digno de recibir nuevas gracias el que no sabe agradecer las que ya ha recibido. Y deja libre actuación a la gracia de Dios, buscando siempre su gloria, tu salvación y la de todas las almas; y no te olvides nunca que los
favores celestiales se conceden no sólo para la propia santificación, sino también para la santificación de los demás. (Padre Pío)