Tu Tiempo con el Número Uno. 4ª Temporada, 14 de noviembre. Quédate quieto Salmos 37:7 NTV: "Quédate quieto en la presencia del SEÑOR, y espera con paciencia a que él actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera, ni te preocupes por sus perversas maquinaciones." A veces, en medio de las situaciones de la vida que tenemos que resolver, sentimos ese afán desmedido por hacer algo y por actuar de manera precipitada, que más que hacernos bien, nos traen consecuencias terribles para nuestra salud y para nuestro propio semblante. Por eso, el verso de hoy nos dice: tranquilo... quédate quieto y espera en la presencia del Señor, que tarde o temprano él actuará. Y la verdad, cada uno de nosotros siempre debería esperar con paciencia a que el Señor haga lo que tiene que hacer, lo cual no implica que de nuestra parte no hagamos todo lo que está a nuestro alcance. Aun así, el verso sigue diciendo: "No te inquietes por la gente mala que prospera". Creo yo que lo dice de esta manera para que de una vez por todas dejemos de compararnos y de pretender darle cabida al descontento una vez más y por cualquier cosa. Todas estas palabras las encontramos en el libro de la vida, en el diario de Dios, y su bendita palabra para que la pongamos en práctica y por fin entendamos que nuestra vida depende completamente de quien nos la dio y no de nuestras capacidades. Vamos a orar. Ayúdame, Señor, a quedarme seguro en tu presencia. Decido quedarme quieto y dejar que tú obres tu voluntad en eso que yo no he logrado controlar por mis propias fuerzas. Decido esperar con paciencia hasta que tu voluntad sea completamente hecha en mi vida y decido no irritarme ni molestarme por lo que vea a mi alrededor, que me lleve a compararme o a sufrir por algo que no debo. En el nombre de Jesús, amén.