Todos tenemos nuestra propias luchas y todos tenemos derecho a ellas. Yo me peleo desde hace tres días con una horda de furiosos zancudos asesinos que se niegan a desaparecer del estudio de grabación y Andrés Manuel López Obrador tenía un país que dirigir y que mejorar. Todo parecía indicar que así sería porque el no mentiría, no traicionaría y no robaría a los mexicanos. Pero no fué así. El personaje que se perfilaba como el redentor de los mexicanos terminó por destruir la esperanza de muchos de nosotros y aquí les dos 10 razones por las que Andrés Manuel López Obrador debe ir a prisión. Muchos de los datos usados en éste video fueron obtenidos de un reportaje de Animal Político realizado por Luis Fernando Lozano, Regina López Puerta y Ave Velázquez, por lo que los invito a que los sigan en todas sus redes sociales y verifiquen Ustedes mismos, y por su cuenta, que son correctos. Es bien sabido que Andrés Manuel siempre dijo que al irse dejaría un sistema de salud como el de Dinamarca pero en la realidad el ex presidente dejó a seis millones de niños sin vacunas entre 2019 y 2020, lo que causó un incremento de casos de enfermedades prevenibles en menores de cinco años, como documenta muy bien Animal Político. 5 mil juicios de amparo se promovieron para exigir la entrega de medicamentos a pacientes por parte del seguro social y mas de 30 millones de personas dejaron de tener acceso a los servicios de salud entre 2019 y 2022. Número que jamás se recuperaría durante el resto del sexenio del necio anciano. También se incrementó el número de recetas sin surtir en 300% y se redujeron los recursos destinados a la atención de cáncer infantil y de mama en mas del 90% permitiendo que miles de ciudadanos fallecieran por falta de atención médica adecuada. Andrés merece ser encerrado por ésto. Durante el sexenio del psiópata que gobernaba, se redujeron los recursos destinados a la atención de cáncer infantil y de mama en mas del 90% permitiendo que miles de ciudadanos, mujeres y niños principalmente, fallecieran por la falta de atención médica adecuada. También se dejaron de comprar otros medicamentos que hubieran permitido que los ciudadanos no desenfundaran dinero propio para conseguirlos cuando el responsable de dárselos es el sistema de salud, que para eso pagan impuestos y cuotas. Sin embargo, el viejo rencoroso simplemente dejó de comprar medicinas obligando a que los ciudadanos tengan que ir a consultar a médicos particulares con el subsecuente gasto y costo que no alcanza a pagarse con las pensiones ofrecidas. Andrés merece la prisión por la muerte de éstos inocentes.