La lista de dolencias que el cánnabis medicinal alivia, o incluso, al parecer, cura, es larga: esclerosis múltiple, migrañas, secuelas de quimioterapia, etc. Pero ¿en qué estado se encuentra realmente la investigación sobre el cánnabis? El ser humano siempre ha utilizado el Cannabis sativa como estimulante y recurso medicinal. Conocía por experiencia el efecto de la planta. No fue hasta el siglo XX, cuando fue catalogado de droga y prohibido. Se consideraba que la marihuana inducía directamente a consumir drogas más duras y se defendía su ilegalización. Incluso la investigación era un tabú, ya que quien quisiera conocer más sobre el cánnabis, se argumentaba, sólo podía tener fines delictivos. Pero, desde hace unos años se percibe un cambio de actitud. Más y más gente accede al cánnabis por razones médicas. El uso terapéutico está permitido en más de 30 países. En Estados Unidos, las familias con hijos enfermos de epilepsia se mudan a estados que recientemente despenalizaron el uso del cánnabis para fines médicos. Junto con este cambio, la investigación del cánnabis también experimentó un verdadero renacimiento. Resultados de estudios recientes confirman que los llamados cannabinoides tienen efecto en el tratamiento de la esclerosis múltiple, la enfermedad de Crohn y la epilepsia; e incluso en ciertas formas de cáncer. Los cannabinoides pueden aliviar también los efectos secundarios de la quimioterapia. La cada más extendida utilización médica parece propiciar en todo el mundo un punto de inflexión en la opinión pública sobre la controversial planta. El reportaje pone de relieve los efectos de la polémica planta desde diferentes perspectivas y da la palabra, en especial, a los científicos.