Hoy el señor nos invita a acercarnos a El con plena confianza, de forma sencilla, y de manera segura. Solo el revivirá nuestras vidas, almas y cuerpos.
Hoy seguimos está vocación de Dios que nos ama a una misión: la misión de anunciar su amor y su paz en un mundo que tiende a rechazar la luz de la verdad.