Es importante buscar cosas simples que nos brinden alegría. Con estos momentos de felicidad, podemos ser conscientes de las vidas afortunadas y maravillosas que llevamos.
Nuestras palabras tienen peso. Cuando decimos o hacemos algo que lastima a otros, debemos disculparnos por ello. Ofrecer condolencias les muestra que queremos que se sientan mejor y que sus sentimientos importan.