Es muy difícil encontrar el equilibrio entre lo que somos y el reflejo de la percepción que tienen los demás sobre nosotros. Desde que somos pequeños crecemos con nos comentarios limitantes que, sin ser conscientes, han dejado una marca profunda en nuestra identidad. “Tú no vales para eso”, “esto no se te da bien”, “déjalo, no es para ti”. Estos son algunos ejemplos de frases que hemos podido escuchar desde niños y que hemos adoptado como ciertas. Si lo dicen los adultos será cierto, ¿verdad? Pues déjame decirte que no. ¿Quiénes somos realmente cuando nos deshacemos de las etiquetas impuestas por nuestro entorno? En este capítulo ahondaremos en estas limitaciones para desafiar las voces del pasado y ser capaces de mirarnos con nuestros propios ojos.