India se ha convertido en el país más populoso del planeta al contar más de 1.429 millones de personas. Un gigante demográfico que en cuestión de pocos años se convertirá en la tercera economía del mundo. La pujanza de su industria y sobre todo el papel del crucial sector servicios permitán que India siga sacando de la pobreza a millones de habitantes. Los cuellos de botella del desarrollo indio, son una falta de emprendimiento debido a una burocracia decimonónica, la insuficiente infraestructura y el sistema de castas. Sin embargo, India progresa como sociedad gracias a la tolerancia de su cultura y la tercera vía que practica en las relaciones internacionales.