Tema 40: QUITA LA DUDA Capítulo 04: DERROTA TUS GIGANTES Serie: YARESH Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra (Santiago 1.6). PRINCIPIOS 1- La duda es uno de los gigantes más activos para detener nuestro avance. Nuestro Dios tiene un plan para que tu milagro sea una realidad en el tiempo correcto. La duda es ese sentimiento de que no lograremos llegar a ver los resultados que esperamos. Es ese instante donde no podemos canalizar adecuadamente nuestro potencial al objetivo porque no tenemos la certeza de que funcionara. 2- Este gigante es tan atrevido que podrá venir a hablarnos al oído y decirnos que Dios NO cumplirá su promesa aunque tu veas que vas corriendo hacia el resultado poderoso que estas esperando. Recuerda esto: Dios te responde cuando sabes lo que quieres, el desafío es trazar tu rumbo hacia ello de manera clara. Damos lugar a la duda cuando no hay orden en nuestra mente. 3- Solo Dios elige a quién y cuándo bendecirá, y no hay nada que ninguno de nosotros pueda hacer al respecto desde la parte humana, podemos interceder con nuestras oraciones, pero es Dios quien al final decido como y cuando. La Escritura dice que Abraham tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios (Romanos 4.20). Esta es la clave: ¡Seguir creyendo hasta el final! 4- Jesús esta parado frente a la tumba de Lazaro y ordena que quiten la piedra. Marta, la hermana de Lázaro le dice: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días (Juan 11.39). Quitar la piedra sería el punto central del milagro, porque dejarla sería dudar de la palabra de Jesús. Es por esto que el Señor le dice: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? Dios nos dirá muchas veces que creamos, al hacerlo, estaremos destruyendo este gigante de la duda. APLICACIÓN Cuando quitaron la piedra, Jesús dio la orden al que tenía cuatro días de muerto en la tumba: ¡Lázaro, ven fuera! Y el que había muerto salió de la tumba, el milagro sucederá en el momento que removemos esa piedra de la duda para ver llegar la promesa que estamos esperando. DECLARACIÓN DE FE Estoy listo para ver mi promesa cumplida, nada puede detener que la semilla de sueño se cumpla. Amén. ORACIÓN Dios maravilloso, Padre bueno, muchísimas gracias por darme la oportunidad de ver tu promesa hecha realidad, por favor no me sueltes de tu mano, quiero serte útil en tu reino y testimonio a muchísima gente. Amén.