Tema 34: NO TE ACHIQUES Capítulo 04: DERROTA TUS GIGANTES Serie: YARESH Sea engrandecido el Señor, que se complace en la prosperidad de su siervo (Salmo 35:27). PRINCIPIOS 1- ¡Siempre alcanzaremos lo que realmente deseamos cuando somos perseverantes! Lo admitamos o no, un gigante a vencer es cuando nos vemos tan pequeños que no podremos conquistar cosas relevantes en la vida. El salmista dijo: Sea engrandecido el Señor, que se complace en la prosperidad de su siervo (Salmo 35:27). A menudo nos sumergimos por los centavos de la vida en lugar de alcanzar los niveles más grandes a los cuales Dios nos esta llamando. 2- Los deseos verdaderos de nuestro corazón siempre nos harán hacer un esfuerzo adicional, empujar un poco más fuerte para alcanzar niveles relevantes. Las circunstancias de la vida pueden provocar que nos veamos con una imagen equivocada: Moisés dijo que era tartamudo, Mefi-boset se veía como un perro muerto, Saúl no se sentía apto para ser el primer rey de Israel, y la lista se hace más larga. ¡El gigante de achicar nuestra imagen estuvo presente en estos seres humanos que fueron relevantes! 3- ¿Cómo se sentía la mujer del flujo de sangre? La historia se relata en Marcos 5, la mujer probablemente sufría mucho,. la multitud que se agolpaba hacía casi imposible que ella llegara a Jesús. Pero ella lo logró. ¡Llegó a tocar el manto de Jesús! Cuando deseas algo lo suficiente, de alguna manera encontrarás la manera de conseguirlo. El desafío es destruir el achicamiento, sentirte menos o incompetente, Dios nos dará la fuerza para lograrlo. 4- Y luego la fuente de su sangre se secó; y sintió en su cuerpo que estaba sana de aquella plaga (Marcos 5:29). Su necesidad (o enfermedad) tuvo que inclinarse ante su deseo (el milagro de su curación). Su deseo se convirtió en el amo de su necesidad. Ganó el deseo y llegó la curación. Todos podemos vencer este gigante y conquistar cualquier pobreza de la vida. ¡Y todo comienza con ese intenso deseo ardiente dentro de nosotros de lograr cosas que parecen imposibles! APLICACIÓN Dios ha sembrado dentro de nosotros las SEMILLAS del deseo por las cosas que Dios tiene aprobadas para nosotros. Debemos concentrarnos en regar y nutrir el crecimiento de esas semillas que nos darán crecimiento y calidad de vida. El desafío es destruir ese gigante de achicamiento y saber que somos grandes en Jesús. DECLARACIÓN DE FE Soy perseverante, no permitiré que nada me achique, soy grande en el nombre de Jesús. Amén. ORACIÓN Dios poderoso, gracias por darme un espíritu poderoso para buscar la dignidad y grandeza a la que tu me has llamado. Estoy tan asombrado de tu bondad para mi caminar, seré más que un vencedor en Cristo porque tengo la gran bendición de ser tu hijo. Amén.