Enviamos para Radio Vitoria / Radio Euskadi una postal sonora desde La Palma, la isla de los senderistas; el lugar que nos encantaría recorrer este verano para disfrutar de sus senderos, calas, cielos y ese espíritu de superación que han demostrado todos los palmeros este año La isla de La Palma añade este año un atractivo nuevo a toda su red de senderos, a la calidad de sus cielos estrellados y a sus calas salvajes: contar con el territorio más joven de todo Europa. La erupción del volcán Cumbre Vieja sitió la vida de los palmeros durante 85 días y ocho horas para ahora convertirse en una nueva oportunidad para salir al encuentro de aquellos que desean disfrutar de la naturaleza más salvaje entre caminos centenarios, salitre y mucha lava. A quién no le gustaría huir de la ola de calor que azota la península a una isla rodeada del océano Atlántico para recorrer las formas caprichosas de los acantilados en piragua o en barca rumbo a ver cetáceos. O a quién no le gustaría disfrutar durante unos días de una isla de 706 kilómetros cuadrados con más de mil kilómetros de senderos balizados para rodear todo el territorio, atravesar caminos centenarios, saltos de agua, tilos milenarios, entre muchos otros. Y poder así, terminar el día a 2.396 metros de altitud en el Observatorio astronómico de Roque de los Muchachos contemplando el universo. Esta ha sido la postal sonora de esta semana para Radio Vitoria, el lugar al que me encantaría ir este verano y volver tal vez durante todo el curso que viene para reconciliarme con la vida en pleno contacto con la naturaleza y con altas dosis de resiliencia, la misma que han demostrado los palmeros durante todo este año.