Qué alegría volver a encontrarnos, y que espectáculo la forma de hacerlo. Me reciben en casita, Pablo y Lola, un día de solecito, con algo de vientecillo, claro, es Zaragoza. ¿Qué esperába?. La mesa preparada como si fuéramos a comer los 500 de Esparta.. Después del ágape, visita a Vetcorner, su lugar de trabajo habitual. La clínica donde los compañeros les remiten casos para su estudio en profundidad. Aquí, Lola y Pablo, han logrado un espacio de consulta, en el que el paciente y el cliente se preguntan si es una consulta o es el rincón de su casa donde se tumbarían a leer un buen libro, escuchar buena música y compartir buenos momentos con amigos. Algunos clientes preguntan…perdón, ¿es esta la clínica? Y ahora sí, nos sentamos, empezamos la entrevista, y voy recordando la imagen de mi “Dr ecográfico” favorito. Una persona inteligente, muy inteligente, de pensamientos rápidos, un portento de la veterinaria, que sin embargo, te escucha como si pudiera aprender algo de ti, humilde y cercano. Con una visión de la vida positiva, y contagiosa, en resumen ¡¡¡buena gente!!! Y a la vez, desde una posición profesional al alcance de muy pocos, se ofrece como un niño juguetón, que le gusta compartir, aprender, escuchar, que te hace disfrutar de cada frase y desear, antes de que acabe el encuentro, volver a tener el siguiente. Gracias Pablo por ser tu. Espero que disfrutéis como yo de este ratito de entrevista, seguro que queréis más al final…