Cuando las personas comen para sentirse mejor, o por esa conocida “ansiedad”, y no para nutrir su cuerpo, estamos hablando de hambre emocional. Existen varios factores que influyen para que esto suceda, entre esos el aburrimiento, el estrés, las influencias sociales, o los hábitos desarrollados desde la infancia. Es importante conocer la razón por la que usted lo hace, y seguir esta guía de consejos que le estará compartiendo la Dra. Ivonne Umaña, nutricionista del Hospital Clínica Bíblica. Por eso, acompáñenos en este podcast.