El  Valencia acierta cerrando sus puertas a Netflix  De la misma forma que cuando comete errores se denuncia y se crítica, cuando el Valencia acierta hay que decirlo. Y ayer por la tarde el club de Mestalla tomó una decisión que supone un enorme acierto. Enorme. No tenía ningún sentido abrir las puertas de Mestalla a Netflix, que pretendía venir aquí a captar imágenes para el documental sobre Vinicius que anunciaron el pasado verano. El relato está escrito, ya tiene su mártir, y sería absurdo contribuir al circo. Como le han comprado la versión falsa al jugador brasileño, Netflix es parte interesada en esto. Que lo hagan, pero fuera de Mestalla. Los tres aficionados racistas del pasado mes de mayo fueron expulsados de por vida. De inmediato. El Valencia fue ejemplar en su respuesta, como lo ha sido con esta decisión. Hay que machacar la idea de matar su relato con una actitud ejemplar de Mestalla. Pitar, crear un ambiente difícil con quien se inventó una versión que ha dañado mucho la imagen internacional del Valencia. Pero hasta ahí. Los pitos no son denunciables. Hay que ser más listos que ellos y no caer en la trampa.