Yo tenía 11 años y un superpoder. Era un día mágico. Y en este episodio te cuento el porqué. Pocas veces he vuelto a sentirme como un dios. Pero cuando consigo esa energía de nuevo, todo lo bueno comienza a pasar. ¿Ya sabes cómo quieres que se sienta esa persona a la que le hablas? Búscalo primero en ti. Luego la magia vendrá... Y la influencia también.