Nunca estas a la altura de nada y cualquier reto que aparece en enfrente es demasiado para vos. Más allá de que tengas la experiencia y conocimiento necesario para superar ese reto... Siempre es porque tuviste suerte, pero jamás por mérito propio o porque te lo merecías realmente. Esta es la realidad de una persona con el Síndrome del Impostor y hoy voy a hablar de como fue mi batalla para combatirlo. Mi nombre es Leandro Molina… Y esto es: Uno más del montón.