DOMINGO V DE PASCUA, CICLO B Este es el tiempo para permanecer en Nuestro Señor Jesucristo, aunque muchos den la espalda, se vayan o se cansen, que muchos encuentren más cómodo criticar que construir.
La resiliencia cristiana no es terquedad, obstinación o cinismo; es la convicción de que Dios es el Señor, que Él tiene su hora y que a nosotros nos corresponde sembrar.
Vivamos unidos al Señor recordando su Palabra e invocando su Espíritu Santo quien nos ayuda a avanzar hacia la verdad completa para alcanzar la santidad.